250 millones de euros disponibles para fomentar hábitos de alimentación saludables entre los escolares europeos

Las asignaciones presupuestarias nacionales para los programas escolares de frutas, hortalizas y leche de la UE para el curso 2019/2020 se han aprobado hoy. Se destinarán 145 millones de euros para frutas y hortalizas, y 105 millones de euros para leche y otros productos lácteos. El programa de distribución se complementa con medidas educativas que muestren la agricultura a los niños y promuevan la alimentación saludable.

 

Phil Hogan, comisario de Agricultura y Desarrollo Rural, ha declarado lo siguiente: «Gracias al programa escolar de la UE, nuestros jóvenes ciudadanos pueden beneficiarse de los alimentos nutritivos, seguros y de alta calidad que producen nuestros agricultores en Europa, al mismo tiempo que aprenden de dónde proceden. La Comisión se enorgullece de contribuir a este importante trabajo educativo, que cimenta unos hábitos saludables desde una edad temprana».

 

La Comisión también ha publicado hoy un informe de evaluación que muestra que, en el curso 2017/2018, alrededor de 159 000 centros escolares participaron en el programa escolar de la UE. En ese período, se distribuyeron un total de 255 500 toneladas de fruta y hortalizas frescas y 178 millones de litros de leche entre los niños europeos, gracias a una aportación del presupuesto de la UE superior a 182 millones de euros. 

 

Contexto

 

Los países que desean participar en el programa escolar de la UE deben notificarlo y presentar su solicitud de ayuda a la Comisión a más tardar al final del mes de enero. La asignación indicativa del presupuesto de la UE a cada uno de los Estados miembros se basa en el número de escolares de cada país y, en el caso de la leche, en el grado de utilización del programa anterior. Las autoridades nacionales pueden transferir una parte (20 %-25 %) del presupuesto asignado de un sector al otro. También pueden notificar su intención de gastar una cantidad superior a la ayuda solicitada si otros Estados miembros declinan utilizar completamente su asignación.

 

Además, los Estados miembros pueden decidir el modo en que ejecutan el programa, por ejemplo los productos agrícolas que se van a distribuir entre los niños o los temas de las medidas educativas que se lleven a cabo. También tienen la opción de completar la financiación de la UE con financiación nacional dedicada al programa.

 

La elección de los productos distribuidos se basa en consideraciones relacionadas con la salud y el medio ambiente, la estacionalidad, la variedad o la disponibilidad. Los Estados miembros pueden fomentar la compra de productos locales o regionales, los productos ecológicos, las cadenas de suministro cortas, los beneficios medioambientales y los regímenes de calidad agraria.

 

Más información

Programa de la UE de distribución de frutas, hortalizas y leche en las escuelas